Fundación para la Democracia Internacional lanzó días atrás la primera etapa de una campaña que tiene como meta visibilizar las formas que el flagelo de la esclavitud, que afecta a más de 21 millones de personas en el mundo, adopta en nuestra región.
En el marco de esta campaña, la Fundación se encuentra articulando esfuerzos con organizaciones internacionales como Antislavery International, OIT, el Museo Internacional de la Esclavitud, entre otras que han decidido apoyar esta campaña, que se inserta en las acciones desarrolladas por OIT dentro de su campaña 50 for freedom.
La esclavitud no murió con el proceso abolicionista del siglo XIX. Lejos de ello, continúa viva y en crecimiento en la mayoría de los países del mundo. Hoy se presenta en formas más complejas, más escurridizas y más esquivas a la mirada superficial, pero igualmente crueles y degradantes. Desde Fundación para la Democracia Internacional se diseñan e implementan acciones con el objetivo de generar conciencia dando visibilidad a estas situaciones.
El programa Rotas Cadenas tiene por objeto identificar empíricamente y caracterizar etnográficamente las nuevas formas de la trata de personas, el trabajo esclavo o forzado y la reducción de a la servidumbre. Se diseñaron acciones con el convencimiento de que es necesario generar conciencia sobre las nuevas formas de esclavitud, a fin de comprometer a la mayor cantidad de personas en el ejercicio de un consumo y una producción más responsable.
Hay diversas características que distinguen a la esclavitud de otras violaciones a los derechos humanos, sin embargo la sola existencia de una de estas características es suficiente para configurar un caso de esclavitud según estándares internacionales.
Una persona se encuentra en situación de esclavitud si: es forzado a trabajar, generalmente bajo amenaza; es propiedad de su empleador, usualmente por medio de abuso físico o psicológico; es deshumanizado, tratado como una mercancía o comprado o vendido como un objeto; es físicamente constreñido o tiene restringida su libertad de movimiento. Es suficiente con que alguna de estas características pueda ser identificada para decir que estamos frente a un caso de esclavitud contemporánea.
La Fundación articuló esfuerzos con organizaciones como Antislavery International, OIT, Museo Internacional de la Esclavitud de los Museos Nacionales de Liverpool, FIHRM, (Federation of International Human Rights Museums), SJAM (Social Justice Alliance for Museums).
Imagen: www.facebook.com/fundacionparalademocraciainternacional
