Aptus | Noticias de educación, cultura, arte, formación y capacitación

Cómo introducir las infografías en el aula

Estas representaciones visuales del contenido de un texto aportan enormes ventajas pedagógicas para sintetizar y retener la información

Las infografías son una representación visual del contenido de un texto, hecha con finalidades informativas, y que puede combinar imágenes, gráficos o texto, entre otros elementos. Su aplicación se da en ámbitos de todo tipo, desde el periodístico al promocional, ya que aporta grandes ventajas pedagógicas que también pueden aprovecharse en el aula, sobre todo si se considera que una parte importante de la información que se retiene es a través del sentido de la vista.

Si bien sus orígenes se remontan a cientos de años atrás, el uso del recurso infográfico se ha generalizado en los últimos años, a partir del desarrollo de las TIC, que impusieron la audiovisualización de la mayoría de los contenidos disponibles en internet.

La sencillez de la que hacen gala las mejores infografías puede hacer creer que su elaboración es una tarea fácil o rápida, pero no siempre es así, según consignó Aula Planeta. Ocurre que alcanzar ese nivel de claridad requiere sintetizar una información que a veces puede resultar compleja para convertirla en un diseño visualmente funcional y, siempre que sea posible, también atractivo.

Elaboración paso a paso:

  • Elegir un tema, escogido a partir de la información sobre la que se quiere hacer la infografía.
  • Recoger los datos necesarios para su composición, a partir de la información disponible que se desea convertir en infografía.
  • Estructurar la información recogida, teniendo en cuenta factores tan variados como el orden en el que se mostrará en la infografía, y que puede ser causal, cronológico o lógico, hasta las personas a las que irá dirigida y sus capacidades para asumir y entender lo que en ella se expondrá.
  • Creación de la infografía, teniendo en cuenta que los elementos gráficos utilizados para la misma como el color, la tipografía o hasta el tamaño de los elementos que la componen, contemplen aspectos como el grado de facilidad de su lectura o que la información que se pretende transmitir sea relevante para el aprendizaje del alumnado. Igualmente, y de cara a su elaboración definitiva, se recomienda la utilización de programas tan intuitivos como Canva, PikToChart o easelly, entre los muchos disponibles a través de internet de forma totalmente gratuita.
  • Pensar que si nuestra infografía resulta atractiva a ojos de los alumnos, probablemente despertará un mayor interés por la materia que impartís.
Imagen: Archivo de imágenes